lunes, 19 de septiembre de 2011

EDUARDO ESPÓSITO (BUENOS AIRES , 1956)




1.     qué objetos te acompañaron toda tu vida?

No sé si mencionarte los que me acompañaron, que no deben ser muchos, ya que he vivido buena parte de mis años en una zona inundable de la provincia de Bs. As. El agua se llevaba casi todo y destruía lo que no podía llevarse. En mi cabeza están los talismanes que siempre he deseado tener, por inútiles que parezcan. Mi mujer me regaló el primero de estos para un cumpleaños, unos binoculares enormes. Todos me preguntaban para qué quería yo semejante cosa. La lista podría completarse con los que pienso tener algún día: una veleta, un telescopio, una brújula y una bota vasca. Como verás, varios instrumentos para estar ubicado en el universo, y uno que me desubique de vez en cuando.

2.     sentís presencias, voces, músicas del trasmundo?

Si por sentir la presencia de Dios, estoy hablando del trasmundo, sí, siento, vivo en su existencia, más a la manera Zen, que a la forma pseudocristiana dominante. Sé que hoy es políticamente incorrecto, casi pueril hablar de Dios. Claro que hablo de una sensación espiritual, no de una doctrina, pues esta me alejaría de mi percepción.

3.     qué pensás de la rosa, los anillos, el mar y los tatuajes?

Respeto algunas rosas en poesía, porque admiro a los poetas que supieron enseñármela distinta, sin la pátina anquilosada de la sensiblería, como Raúl G. Aguirre, para dar un ejemplo. De todas formas me gustan más los lirios, el cliclamen, etc. Los anillos me remiten irremediablemente a Tolkien, con su carga de magia. El mar,  ah! qué puedo decir; eso que brama, y visto o percibido en la noche hace temblar tus piernas por pequeñez o insignificancia.


4.     cuál es tu superstición?

Desde el punto de vista de algunos, un dios sería mi superstición, la presencia a la que llamamos con ese título honorífico. Podría aclarar dada la ignorancia que ocurre respecto al tema, que no hablo de Jesús, un hombre extraordinario sin dudas, imbuído de energía divina, pero que nunca dijo ser Dios.

5.     en qué parte del cuerpo, el aire o el paisaje sentís la poesía?

        La siento como un barullo interno, un hormigueo a
        ciertas horas en especial, una necesidad primal de largar todo y
        escribir como al dictado de alguien que no veo. Las mañanas como
        con música de Grieg y profundamente solares, me resultan ideales.
        Las siestas, por el contrario me inhiben totalmente. Son horas de leer      
        en todo caso.
             
6.     escribís mientras escribís o antes o después?

Mi grado de vagancia produce un efecto de escritura sobre escritura.
No soy un corrector obsesivo, está lejos de mi naturaleza. Es más no me preocupa demasiado (cualquier poema es eternamente corregible, y las energías personales limitadas). Se ve, diría mi analista, que guardo mis obsesiones para otros menesteres, más domésticos y cotidianos.

7.     qué autores no releerías?

No creo poder contestar esta pregunta. Quizás hoy diga que fulano, y mañana me halles leyéndolo con fruición. Culpa de Heráclito, con sus Eduardos, pasando por  cambiantes ríos de libros y revistas!


8.     de los poetas que conociste cuál, cuales te parecieron que unían su vida a sus palabras?

Creo no estar equivocado al decir que los primeros surrealistas, se tomaron en serio la idea de Rimbaud, respecto a que vida y poesía son una sola cosa, y por eso y su combatividad, aún los admiro. En la Argentina, rescato la labor desinteresada y militante, de Raúl G Aguirre, que llegó incluso a descuidar su propia labor como vate. Me permito además, citar una breve frase de Giovanni Raboni, poeta italiano del siglo XX que dice: “A los poetas avaros con la vida y con los demás cuanto más envejezco, menos los amo, es más, ni siquiera los entiendo”

9.     qué, quién, quiénes escribe en vos?

Supongo que eso que llamaban inspiración, y que es el subconsciente golpeando a las puertas de la razón, no para que se abran, sin para astillarlas con un poema tras otro.

10. vuelven algunas palabras, algunos temas o algunos climas?

Es inevitable. Estoy tan unido a mí! La infancia, el amor, los miedos, las obsesiones. Como ves, nada nuevo, sólo que estas son mías.

11. en tu vida, la poesía como propósito, destino o circunstancia?

Como propósito y razón de vivir, ya que en este caso agrego mi humilde aporte correspondiente a la enseñanza y tramisión, por contagio y prepotencia de lucha, contra un sistema humano perimido y detestable, muy alejado de los valores aútenticos del hombre.

12. qué quisieras leer mañana, que quisieras releer para siempre?

Algo que me deslumbre, que agregue una nueva frecuencia a la vibración que soy. Temo ser injusto con muchos si me pongo a nombrar.

13. qué pensás del romanticismo alemán?

Que en todos los órdenes, cambió para siempre nuestra visión del hombre en la sociedad y en el universo. Que somos sus hijos, bajo la veladura de otros nombres.

14. el silencio, la soledad, la transparencia, el orden, adentro, afuera, a
veces, nunca?

El silencio donde éramos y volveremos a ser.

15.  qué fue lo imposible?

Obnubilarme a veces con la idea de que la poesía vence a la muerte. En su poema Tabaquería, Pessoa habla de ciudades, poemas, farmacias desapareciendo hasta atragantar la nada. La entropía parece ser nuestro destino.

16. la poesía es una arma cargada de futuro, pasado, eternidad?

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17. la poesía es literatura?

Veo a la poesía, como el núcleo vivo, el nervio central de toda manifestación artística. Entonces sí, y con seguridad “el resto es literatura”.

18. qué lugar ocupa la poesía argentina en Latinoamérica y en la lengua
20. castellana?

Tenemos poetas extraordinarios, a pesar de los esfuerzos mediáticos (y amiguismos de tercer orden), por sumergirlos en el marasmo de vulgaridad, donde confluyen y se confunden la Biblia y el calefón. En mi opinión es un color más, con muchas tonalidades, añadido al abanico latinoamericano. Lástima que algunas “tonalidades” nacionales se arroguen el derecho de representar “lo argentino”, en detrimento de la diversidad.

21. cuáles poetas argentinos te parece que deberían estar y no están?

Creo que todos “estamos”. El tema es dónde. Hay gente que es feliz en sus “círculos cerrados de ahorro de prestigio poético”, y suelen ofenderse si uno los señala como ghettos. “No inviten a jugar a otros amiguitos”, parecen decir, como si la fama se les fuese a gastar, o temieran perder algún superpoder…

22. alguien te llevó o fuiste solo a esa palabra oscura?

Siempre existen influencias, aunque, como les digo a mis alumnos en los talleres de poesía, uno va “solo y su alma” hacia lo deliciosamente ténebre.

23. fuera de la poesía que campo del arte te interesa?

La música sin dudas, en todas sus formas y manifestaciones, siempre que halle poesía en ellas. La plástica, con las mismas prerrogativas.
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4. la poesía es una tarea del espíritu o una emanación de la historia ¿hay
25. espíritu, hay historia?

Mi naturaleza se inclina a verla más como una tarea del espíritu, casi una religión. Algo que nos una, que nos eleve personalmente para que esto sea posible. Puedo verla también como una emanación de la historia, si pienso que está puesta en el corazón del hombre, para su evolución hacia un plano de vida superior a esta meseta en la que estamos estancados hace ya siglos.

26. cuál es la mayor dificultad en la relación existencia-poesía?

Que indefectiblemente, los poetas también comen.
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7. quisieras responder otras preguntas, quisieras hacer otras preguntas?
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PUBLICÓ : 

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